
Buscaste en todos lados un motivo para vivir. Buscaste en el pasado y el presente, intentando encontrar un detalle que pudiera haber cambiado tu vida, y encontraste miles. Observaste cuan camino se bifurcó de tu destino. Cientos de diferentes resultados. Todos distintos, todos iguales.
Caminaste entre lágrimas que la lluvia confundió por tuyas, buscando un cambio, alguna salida. Y continuaste sonriendo entre amargas noches y largos días. Mirando hacia adelante, entre lágrimas y sonrisas, intentando sujetar la vida y contentar la muerte.
Ayer me preguntaste: “¿Qué has hecho para pagar tu derecho a vivir?”
Hoy entre sonrisas te respondo: “Sólo vivo”,
con la seguridad de que en mi interior me preguntaré si alcanza.
Foto: Budross Mardini